Dialogando con el Búfalo

TIJUANA.- Los contribuyentes que generen facturas superiores a dos mil pesos, a partir de enero de 2011, tendrán que hacerlo bajo un formato digital con el cual el Servicio de Administración Tributaria (SAT) espera reducir y agilizar trámites fiscales, pero la Asociación Mexicana de Contadores Públicos (AMCP) considera que no será así.

Juan Manuel Ramírez Robles, presidente del organismo, comentó que hay grandes empresas que ya aplican la medida, pero no pueden obligar a las empresas que tienen pocas ventas y poco margen de utilidad, ya que provocaría sacarlas del mercado al incrementar un gasto más en los pequeños contribuyentes.

“El 75% de los negocios en el país son menor contribuyentes, el efecto aún se desconoce, ya que aquellas empresas que se quedaron con la dotación de facturas lo ideal es que el ejercicio fiscal 2011 continúen usándolas hasta que se les agote esa dotación en papel”, detalló.

Comentó que según autoridades hacendarias, las ventajas son el que la autoridad tendrá más información confiable y en tiempo real, lo cual permitirá también realizar devoluciones más rápidas.

El nuevo sistema permite que al realizar una operación, el contribuyente enviará la información al SAT, la cual validará la factura y la devolverá con un sello de la autoridad, en tanto que las facturas de papel que se expidan hasta el 31 de diciembre de 2010 podrán convivir con los comprobantes digitales por los dos años que tienen de validez.

Ramírez Robles detalló que la implementación de los Comprobantes Fiscales Digitales se dará a partir de enero de 2011, en tanto que hoy en día el mecanismo es opcional, ya que el contribuyente puede generar facturas en papel y digitales simultáneamente.

“A partir del 2011, dependiendo del tipo de operación, si es de 2 mil pesos o más tienen que ser factura digital, si la cantidad es menos se podrá hacer en un comprobante impreso”, precisó.

Agregó que hasta el momento es mínima la cantidad de contribuyentes que ya están utilizando el formato digital, como los agentes de seguros y empresas grandes, que ya están haciendo el efecto en cadena para que todos sus proveedores trabajen bajo este esquema.