Dialogando con el Búfalo

MEXICALI.- En la pasada campaña política los aspirantes a diputados de Acción Nacional prometieron retirar la Tenencia Vehícular, los hoy legisladores por mayoría del PRI en Baja California anunciaron que sí lo harán, pero el Gobierno Estatal está en contra.

El Impuesto a la Tenencia Vehicular es un impuesto federal que se distribuye en su totalidad entre las entidades federativas y para Baja California en particular representa una importante fuente de ingresos para desarrollar programas y acciones en materia de educación y obra pública, argumentó el Secretario de Planeación y Finanzas del Estado, Manuel Aguilar Bojórquez.

Lo curioso es que quiénes gobiernan Baja California son emanados del PAN, y sus compañeros de partido, hoy diputados no han dicho nada al respecto a pesar de ser quienes promovieron la eliminación de dicho impuesto en la pasada elección, aunque ahora son minoría en el Congreso Local.

A menos de una semana de renovarse la Legislatura, los diputados del PRI, que son mayoría, anunciaron el miércoles por la tarde que eliminarán de dicho impuesto, pero un día después el Gobierno del Estado envió un comunicado a nombre del Secretario de Finanzas explicando porqué no se debe retirar dicho cobro a los automovilistas.

Se establece como argumento que "si bien este impuesto ha sido criticado al considerarse que ya cumplió con el objetivo por el que fue creado hace más de cuarenta años, actualmente representa ingresos que son aplicados por los Estados en sus programas de inversión y tan sólo en Baja California durante 2010 se recaudarán 530 millones de pesos que se destinarán a proyectos educativos y obras de infraestructura".

Aguilar Bojórquez apuntó que a nivel federal se prevé eliminar el Impuesto a la Tenencia Vehicular en 2012, por lo que ya el Estado está en un proceso de transición para compensar los ingresos que se dejen de percibir.

Es por ello, que el Poder Ejecutivo trabaja para afinar los esquemas de compensación para evitar que acciones como la construcción de planteles educativos, centros de salud o infraestructura en el Estado, se vean afectadas.

Resaltó que de los 530 millones de pesos que se esperan recaudar este año por este Impuesto, 106 millones de pesos serán para los Ayuntamientos, de ahí la importancia de aminorar el impacto en el presupuesto.

Confió en que mediante el trabajo coordinado, incluido el Poder Legislativo del Estado, se podrán encontrar los esquemas adecuados para estar preparados ante la eventual desaparición de este impuesto y continuar con los grandes proyectos que requiere Baja California.